Ya se trate de una empresa consolidada o una startup, todos necesitan un espacio para trabajar. A la hora de decantarse por una oficina propia o un espacio coworking, no sólo se tiene en cuenta el tamaño de la empresa, sino que entran en juego otra serie de elementos como la forma de trabajar, la imagen, los costes, etc.
¿Cuáles son las ventajas de un espacio coworking?
Para pequeñas empresas, autónomos y startups, siempre parece la opción más fácil, sobre todo por la reducción de costes que supone y el acceso a una gran variedad de servicios que estos espacios ofrecen. Sin embargo, muchas grandes empresas se están uniendo por varias razones, como que son espacios de alta calidad, una mejor gestión del tiempo por la flexibilidad que ofrecen o el fomento de la colaboración interna que se puede dar.
Entre las 5 principales ventajas destacan:
- Reducción de costes: compartir el espacio de trabajo reduce los costes de alquiler. Se calcula un ahorro en costes fijos de mantenimiento de una oficina en torno al 60%.
- Imagen: son espacios bonitos, modernos y con una decoración que ayuda a concentrarse y a mantener reuniones con clientes.
- Mayor número de ideas: al compartir espacio con gente tan diferente la aportación de ideas es mayor y las nuevas propuestas llegan de boca de gente con diferentes experiencias.
- Red de networking: siendo la red de contactos algo clave en cualquier empresa, estos espacios compartidos ponen en común a diferentes profesionales que aumentando dicha red de contactos.
- Cursos y talleres: Los espacios de Coworking suelen celebrar este tipo de eventos de forma mensual, lo que puede ayudar a aprender, utilizarlos para hacer networking, e incluso, para dar a conocer la empresa en los mismos.
Pero estos espacios también tienen sus desventajas frente a una oficina propia:
- No hay intimidad: si bien una de las ventajas es poder compartir espacio con otros profesionales, una de sus principales desventajas es que se pierde la intimidad en cierta medida.
- No hay imagen corporativa: Frente a la ventaja de ser espacios bonitos y modernos, se pierde la esencia de la empresa, no hay logo ni colores ni ningún otro elemento corporativo.
- No hay secretos: Al igual que se comparten ideas, también se pueden compartir secretos, ya sea por mantener una conversación en un lugar inadecuado o por dejar a la vista papeles u ordenadores con información que no se desea compartir.
Resumiendo, para las empresas que buscan reducir costes, obtener flexibilidad y un entorno de trabajo profesional, tengan el tamaño que tengan, el coworking es una opción a tener en cuenta y probablemente la mejor.